"La imitación de Cristo, escrita por Tomás de Kempis en el siglo XV, es una de las obras espirituales más influyentes del cristianismo. Concebida como una guía para la vida interior, el texto propone un camino de humildad, recogimiento y abandono del mundo exterior para imitar a Cristo no solo en palabras, sino en obras y en espíritu.

Dividida en cuatro libros breves, la obra aborda temas como el desprecio de las vanidades mundanas, la importancia de la vida interior, la obediencia, la paciencia ante la adversidad y la unión con Dios a través del sacrificio y la contemplación. Lejos de ofrecer dogmas teológicos complejos, su estilo es directo, reflexivo y profundamente devocional, dirigido a quienes buscan una relación íntima con lo divino.

Más que un tratado moral, La imitación de Cristo es un espejo para el alma, una invitación constante a vivir con sencillez, disciplina y fe. A lo largo de los siglos, ha sido leído por monjes, santos, laicos y buscadores espirituales por igual.

Su mensaje trasciende credos: es una llamada universal a la autenticidad, al desapego y al amor como camino hacia la plenitud interior."

Tomás de Kempis (c. 1380–1471) fue un monje agustino, escritor y místico alemán del movimiento devocional conocido como La devotio moderna. Es reconocido mundialmente por su obra La imitación de Cristo, uno de los textos más leídos y traducidos de la espiritualidad cristiana occidental.