Desde que era niña, Paula sentía que el mundo tenía capas que los demás no podían ver. Los cementerios le susurraban historias, las sombras se deslizaban en su habitación y los sueños le revelaban verdades antes de que sucedieran. Su familia lo llamaba herencia, pero ella no sabía si era un don o una condena.

¿Cómo vivir con la certeza de que hay algo más allá de lo que los ojos alcanzan?

Lo que parecía solo una sensibilidad especial resultó ser un legado. Un linaje de brujas elementales corre por sus venas, mujeres conectadas con la tierra, el agua, el fuego y el aire. Pero ser bruja no es lanzar hechizos con una varita ni volar en escoba; es entender las señales del universo, abrazar la intuición y aprender a caminar entre dos mundos sin perderse en ninguno.

Por mis ancestros nací bruja es el testimonio de una vida marcada por lo oculto, lo inexplicable y lo profundamente real. Un relato donde la magia y la muerte bailan juntas… y donde ignorarlas nunca ha sido una opción.

Desde pequeña, mi vida estuvo marcada por algo que no podría comprender, pero que siempre estuvo presente. Lo que comenzó como sueños extraños y desconcertantes pronto se convirtió en una realidad tangible: sombras que acechaban en los rincones de mi habitación, y susurros inaudibles que parecían venir de otro lugar. Mis ojos se abrieron a un mundo que no todos podían ver, pero que yo conocía demasiado bien. Esta es mi historia, la historia de cómo lo paranormal no fue algo que elegí, sino algo que me eligió a mí.