Este no es un libro sobre la pérdida, aunque el vacío esté en cada página. Tampoco es un relato de lucha, aunque Eva, con solo cinco años, haya peleado con la fuerza de una gigante. Este es un homenaje a una niña que convirtió el dolor en magia, a una sonrisa que nunca se rindió, a unas pequeñas manos que dejaron una huella inmensa.

Papá, ¿por qué a mí? es el diario de un padre que aprendió a caminar entre sombras sin perder de vista la luz. Es un testimonio de las preguntas imposibles, de los recuerdos que queman y sanan al mismo tiempo, y de las noches en vela escribiendo para no olvidar un solo instante de su pequeña: su alegría, su valentía, su mirada traviesa. Pero, sobre todo, es una carta de amor eterno, tejida con lágrimas, orgullo y una promesa: que su legado siga iluminando vidas, que su risa sea la voz de todos los niños que no pudieron alzarla.

Manuel José Velázquez no escribe solo para recordar a su hija. Escribe para que quienes lean estas páginas comprendan que el verdadero superpoder no es vencer, sino amar y resistir, incluso cuando el mundo se quiebra. Este libro no termina en su última palabra. Continúa, cada vez que alguien decide creer en la magia de Eva.

Manuel José Velázquez Sánchez-Valdepeñas nació el 1 de septiembre de 1979 y natural de Daimiel.
Maestro de Educación Física y Primaria, apasionado de los niños, el deporte y la enseñanza.
Conoció a Mari y, junto a ella, formó una preciosa familia numerosa, siendo el papá de Diego, Vega y Eva.
La vida le marcó un antes y un después con la pérdida de su hija Eva, lo que le llevó a cambiar otra de sus pasiones, los números, por las letras. En ellas encontró un refugio que le permitía dar voz a los sentimientos más profundos de su corazón y compartir sus experiencias, reflexiones y recuerdos. Pero, sobre todo, le brindaron la posibilidad de expresar y compartir el amor incondicional que siente por Eva.
Manu es uno de los fundadores de la Asociación La magia de Eva, inspirada en el legado de su hija. Su objetivo es visibilizar la lucha contra el cáncer infantil, sensibilizar a la sociedad y recaudar fondos para la investigación de esta cruel enfermedad.
A día de hoy, uno de sus mayores deseos es ser conocido como el papá de Diego, Vega y Eva.