Una comedia romántica no ficticia que narra las aventuras y desventuras de un perdedor sentimental que ansía el amor y la felicidad. 
   
Edward es un perdedor sentimental inmerso en plena crisis de los cuarenta tras la ruptura con su pareja. ¿Qué podría hacer para superarla? ¡Está claro: empezar a usar Tinder! De esta forma, nuestro protagonista se adentrará en una especie de odisea para alcanzar ese gran amor que siempre ha anhelado pero que, en realidad, jamás ha conocido. ¿Será capaz, finalmente, de encontrar la felicidad en Tinderlandia? El humor y la ciencia se entremezclan en esta comedia romántica llena de situaciones y experiencias reales con las que, probablemente, se sentirán identificados aquellos lectores que hayan utilizado la popular aplicación de citas en algún momento de sus vidas.
   
 Podríamos definir Memorias de un cuarentón en Tinder como el supervillano que le planta cara a eso de «Encuentra a tu persona vitamina». Así que, si piensas que las claves para encontrar a una persona vitamina no son más que chorradas aderezadas con pseudociencia, el destino y el Espíritu Santo, quizá este sea su libro, aunque tampoco existan evidencias.

Edward Hill Peterson nació en 1980, en una pequeña isla en medio del Mediterráneo. Escribe por placer desde que era un niño y adora a los animales. Siente una gran pasión por la ciencia, especialmente por la psicología cognitiva y la economía conductual. También es un entusiasta de la ciencia-ficción. Su mayor logro en la vida quizá haya sido escapar de un bucle espacio-temporal en el que permaneció atrapado durante cuarenta años.
Ahora, publica su primer libro, Memorias de un cuarentón en Tinder, con Entre Libros Editorial.