La novela "El legado que seremos" de Almudena Otaola Urkijo, es un relato histórico que sigue la vida de varias generaciones de una familia vasca, resaltando la importancia de la memoria y la transmisión de la identidad a lo largo del tiempo.

La historia comienza en 1895 en el Valle de Oquendo, donde se nos presenta a Robustiano y Bibiana, dos jóvenes que, tras un encuentro fortuito, inician una relación que los llevará al matrimonio. A través de sus vivencias, el lector es transportado a un mundo donde la vida rural, las tradiciones vascas y la estructura familiar juegan un papel crucial. Con el tiempo, la pareja forma una familia numerosa, y cada hijo representa un eslabón en la cadena de la memoria familiar.

El relato no solo aborda la vida cotidiana, sino que también sitúa a los personajes en un contexto histórico marcado por la abolición de los fueros vascos, el auge industrial de Bilbao y los conflictos políticos del siglo XIX y XX. La narración avanza hasta los preludios de la Guerra Civil Española, un periodo que afectará profundamente a la familia y pondrá a prueba su resistencia y valores.

A través de un estilo detallado y evocador, la autora teje una historia que es tanto un homenaje a sus raíces como una reflexión sobre la importancia de preservar la memoria colectiva. Cada personaje es un testimonio del tiempo y de cómo la identidad y la historia se transmiten de generación en generación.

Almudena Otaola Urkijo ha estado estrechamente vinculada al PNV desde su juventud. Licenciada en Derecho por la Universidad de Deusto, ha compaginado su trabajo en el ámbito privado con diversas responsabilidades políticas. En 2017, se incorporó al Gobierno Vasco, y desde entonces su trayectoria profesional ha estado ligada al ámbito público, tanto en su faceta política como funcionarial.

Entre 2019 y 2023, fue elegida senadora por Álava, y en la actualidad forma parte del Gobierno Vasco. Su compromiso con Euskadi es absoluto, y siente un profundo agradecimiento por la oportunidad de contribuir al desarrollo de su país. Este compromiso lo transmite a sus hijos desde los valores del respeto a los derechos humanos, la integridad y la honestidad.

Esta obra es un homenaje a quienes la precedieron y de quienes heredó su compromiso con el nacionalismo vasco y Euzkadi. Es un reconocimiento a quienes lo dieron todo por la libertad y los derechos de los que hoy disfrutamos. Porque se lo debemos: ellos tenían que tener un lugar en la historia de Euzkadi.