Como un viaje al desnudo, sin disfraces ni máscaras, cada verso es un grito de dolor, a la lucha y al amor inquebrantable. Este poemario es crudo como una herida abierta y sanador como un abrazo inesperado. Alicia Higueras teje con palabras la vida misma: sus sombras más oscuras, sus luces más cálidas y todo lo que queda entre ambos extremos, revelando las verdades que a menudo preferimos callar.

Con honestidad, Alicia derrumba paredes y rompe corazas, para hablar del miedo que paraliza, del amor que salva y de las cicatrices que narran historias de resiliencia. A través de metáforas poderosas y versos descarnados, se adentra en las batallas internas y externas de la vida moderna, los desengaños con la sociedad, los demonios de la rutina y los ecos del amor propio que emerge en medio del caos.

Es una obra que desafía a enfrentarse a los silencios impuestos por la vida, a caminar con valentía por los senderos de las emociones y a sanar mediante el poder de la palabra. Aquí, la autora nos deja una invitación apasionada: a que nos reconozcamos en cada línea y a que nos atrevamos a sentir lo que duele y lo que llena de luz.

Alicia Higueras Alba es una mujer de 32 años, española residente en Barcelona ciudad. Apasionada de la poesía, de la escritura y de los animales. Perdió a su padre con 8 años de edad, al cual admirará toda la vida por su gran trayectoria de director de publicidad de Panrico y Donuts.

Desde entonces tuvo una vida dura, siempre quiso seguir los pasos de su padre y que se sintiera orgullosa de ella desde el cielo. Tuvo que empezar a trabajar muy joven, a los 16 años de edad para valerse por sí misma, empezó en el sector de la hostelería hasta que descubrió el sector inmobiliario en el cual lleva 6 años, y hace tan solo 4 años que emprendió y actualmente es empresaria del sector.