Esto es completamente callejero,
se ha escrito bajo las farolas y las luces de ciudades,
mientras caminaba de vuelta a casa, de vuelta a algún hotel
o intentaba volver a mí misma.

Es el resultado de historias de noche, de baile, de alcohol y de olvido.

Lo que aquí presento no ha nacido frente a un papel.
Supongo que eso es lo que lo hace especial.

Cr

En su tercer poemario, Mientras te miro bailar, Cristina Abella (Madrid, 1996) lanza una ráfaga de versos algo rebeldes e insomnes. Una pequeña obra inundada de observación, detalles y juventud, que nace en las calles de diferentes ciudades del mundo y se completa en el sentir de esta inquieta y ondulante escritora. Un paseo a través de algunos de sus viajes, recuerdos y maneras de mirar.