Y esa roca, áspera y multiforme en sus inicios, pierde materia a medida que rueda, golpe tras golpe se va puliendo, y es cada vez más bella, más lisa, más suave.
Van quedando por el camino: frases, pensamientos, su deseo de que las mariposas y los pájaros sigan volando. Al tiempo que ella se hace polvo, poco a poco, en un mundo lleno de reglas, se pregunta: ¿tendrá reglas el polvo?, ¿tendrá fronteras?, podría tal vez, bailar con el viento al arrullo de estos versos.

Con el corazón en la mano, Rebeca Camperi Cadogan nos entrega su ópera prima llena de reflexiones y sentimientos. Un libro precioso que nos invita a mirar el mundo que nos rodea y el que llevamos dentro.

Nació en la Ciudad de Villarrica (Paraguay), en donde pasó su niñez. Se trasladó con su familia a Asunción. Culminó sus estudios en la Universidad
Católica de Asunción, es Licenciada en Ciencias Contables, profesión que ejerce.
Su gusto por la literatura la lleva a integrar diferentes grupos de clubes de lectura. Participa en las tertulias literarias, actividades culturales y
actividades de EPA (Escritoras Paraguayas Asociadas), en las que lee sus poemas. Forma parte del grupo de Lectura Kabichu'í. Estudió varias temporadas en la Escuela de Escritores de El Lector a cargo de la Prof. Irina Ráfols. Tiene publicaciones en la Antología "Nada Convencional" con la Editorial El Lector, de esta Escuela y en las Antologías de EPA "Memorias y Escritos de Verano", Memorias y Escritos de Otoño-Invierno" y "EPA 25 años escribiendo juntas".